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Aerotermia aire-agua, aire-aire, por suelo radiante, split… Te explicamos cada tipo y en qué contexto conviene elegir una u otra. 

Familia disfruta de un cuento en el sofa de su casa con calefacción por aerotermia

Si estás pensando en cambiar el sistema de calefacción de tu hogar, probablemente buscas algo eficiente, cómodo y que no te obligue a rehacer media casa. Oye, y si encima hace que tu factura de climatización se reduzca considerablemente… pues mejor, ¿no? Si te digo que la aerotermia cumple con todo eso, no te digo nada nuevo. Se ha convertido en una de las opciones más populares hoy en día por su ahorro y su versatilidad.

Pero claro, ¿qué opción elegir? Hay sistemas aire-aire, agua-aire, de suelo radiante, con radiadores… Para ayudarte a tener las cosas más claras queremos explicarte qué tipos de calefacción por aerotermia existen, en qué se diferencian y cómo elegir el que encaja contigo y tu hogar. 

¿Qué es la calefacción por aerotermia?

La aerotermia es una tecnología basada en bombas de calor aire-agua o aire-aire. En invierno, esta bomba “roba” calor del aire exterior (sí, incluso cuando hace frío) y lo transfiere al interior de la vivienda. Aquí te lo explicamos en detalle. Es muy eficiente porque por cada kWh eléctrico que consume puede entregar unos 4 kWh de energía térmica. Es decir, produce hasta un 400% más de la energía que consume.

Cuando la bomba es aire-agua, calienta agua que circula por emisores (suelo radiante, radiadores de baja temperatura o fancoils). Cuando es aire-aire, impulsa directamente aire caliente a través de unidades interiores (splits o conductos). En ambos casos, en verano también puede refrescar para que disfrutes todo el año de la temperatura perfecta. 

¿Cuáles son los principales tipos?

Aire-agua con suelo radiante/refrescante

Dentro de los tipos de calefacción por aerotermia aire-agua, esta es la que ofrece mayor confort térmico y eficiencia. Trabaja con agua a baja temperatura (30–40 °C), por lo que la bomba de calor rinde muy bien. El calor se distribuye de forma uniforme por el suelo, sin corrientes de aire. Eso sí, requiere de una obra importante para instalar la red de tubos que va bajo tus pies, así que es ideal para nueva vivienda o para una reforma integral. 

Hombre disfruta en su casa leyendo el periódico.

2. Aire-agua con radiadores de baja temperatura

Si no quieres ponerte a levantar suelos y tu idea es una reforma menor, puedes cambiar tus radiadores tradicionales por radiadores de baja temperatura. Su funcionamiento se basa en su capacidad para emitir calor a partir de agua que no necesita estar extremadamente caliente, lo cual es posible gracias a su diseño específico que maximiza la superficie de intercambio térmico. Esto los convierte en una opción ideal cuando se combinan con sistemas de aerotermia, ya que las bombas de calor aerotérmicas calientan el agua a temperaturas más moderadas.

Y si no quieres cambiar tus radiadores, no te preocupes. En muchos casos, puedes seguir usándolos. Es posible que necesiten algunos ajustes para funcionar bien con aerotermia. Pero, en general, no tendrás que reemplazarlos por completo. Sin embargo, en comparación con los de baja temperatura, los radiadores tradicionales necesitan más energía para alcanzar la misma temperatura ambiente, lo que incrementa el gasto energético. 

3. Aire-agua con fancoils (ventiloconvectores)

Un fancoil, o ventiloconvector, es un equipo de climatización que utiliza un sistema de agua-aire para calentar o enfriar una estancia. Está compuesto por un ventilador (fan) y un intercambiador de calor/frío (coil) por donde circula agua. Su funcionamiento consiste en aspirar el aire, pasarlo a través de la batería con el agua a la temperatura deseada, para luego impulsarlo a la estancia ya climatizado. 

Responden rápido, permiten zonificar con facilidad y son compactos (de pared, suelo o conductos). Su temperatura de impulsión es baja, lo que favorece el rendimiento de la bomba. A cambio, notarás un leve movimiento de aire y requiere filtros limpios para mantener el confort.

4. Aire-aire (bombas de calor tipo split o conductos)

Aquí no hay agua: la unidad exterior conecta con una o varias interiores que expulsan aire caliente. Ventajas: instalación más rápida, una inversión inicial más moderada, gran modulación y tiempos de respuesta muy cortos. Ideal para pisos bien aislados y para combinar con energía fotovoltaica. Como contrapartida, el calor es más localizado y la estética depende de las unidades interiores. 

Mujer lee una revista junto a la ventana en su casa con calefacción por aerotermia

5. Sistemas híbridos o bivalentes (aerotermia + apoyo)

Combinan una bomba de calor con otra fuente (por ejemplo, caldera existente) para cubrir picos de demanda o climas muy fríos. La gestión automática activa uno u otro según temperatura exterior o precio de la energía. Son útiles en viviendas con radiadores antiguos de alta temperatura donde no se puede cambiar emisores, o cuando se busca una transición gradual.

6. Monobloc vs. bibloc

En monobloc, todo el circuito hidráulico queda en la unidad exterior (se simplifica la instalación interior). En bibloc, la unidad interior incluye intercambiador y control, y la exterior se encarga del ciclo frigorífico. La elección depende del espacio disponible, la climatología y preferencias de instalación.

Comparativa rápida de los sistemas de calefacción por aerotermia

Sistema

Obra

Eficiencia*

Confort

Inversión

Aire-agua + suelo radiante/refrescante

Alta

★★★★★

★★★★★

€€€–€€€€

Aire-agua + radiadores de baja Tª

Media

★★★★☆

★★★★☆

€€€

Aire-agua + fancoils

Media

★★★★☆

★★★☆☆

€€–€€€

Aire-aire (splits o conductos)

Baja

★★★★☆

★★★☆☆

€–€€

Sistemas híbridos/bivalentes

Media

★★★☆☆

★★★★☆

€€–€€€

Monobloc (hidráulica fuera)

Baja-media

★★★★☆

★★★★☆

€€–€€€

Bibloc (unidad interior + exterior)

Media

★★★★☆

★★★★☆

€€€

 

¿Cuál es mejor para cada caso?

Te lo ponemos fácil: piensa primero en el tipo de obra que estás dispuesto a hacer, cómo está de aislada tu casa y si quieres también frío en verano. Con eso podrías tener fácil la decisión de qué sistema de calefacción por aerotermia es mejor para ti.

Obra nueva o reforma integral

Ve a por aire-agua con suelo radiante/refrescante. Es lo más confortable y eficiente porque trabaja a baja temperatura y reparte el calor de forma uniforme.

Consejos: pide zonificación (día/noche) y curva climática para que el equipo ajuste solo la temperatura del agua según el frío que haga fuera.

Reforma sin levantar suelos

Elige aire-agua con radiadores de baja temperatura o fancoils.

Consejos: dimensiona para impulsiones de 40–50 °C. Cuanto más baja la temperatura del agua, más ahorras.

Mínima obra, alquiler o presupuesto contenido

Tu opción, entonces, es un sistema aire-aire por splits. Se instalan rápido, puedes controlar la temperatura por estancias (si instalas multisplit) y su mantenimiento es sencillo.

Consejos: valora el nivel sonoro y acuérdate de limpiar filtros al menos al inicio y final de temporada.

Vivienda en clima frío o de montaña

Funciona muy bien aire-agua con emisores de baja temperatura (suelo, fancoils o radiadores de baja temperatura), siempre que la envolvente sea decente.

Consejos: invierte en aislamiento (ventanas, burletes, cubierta) y pide equipos con buen SCOP en tu zona.

Tienes o vas a poner placas solares

¿Quieres lograr la autosuficiencia energética en tu hogar? La integración de un sistema de aerotermia con placas solares fotovoltaicas representa el matrimonio perfecto entre eficiencia y sostenibilidad. Al combinar ambos sistemas, se puede utilizar la electricidad generada por las placas solares para alimentar el sistema de aerotermia, optimizando el consumo de energía y reduciendo la dependencia de la red eléctrica.

Placas solares

La buena noticia es que hay una solución de calefacción por aerotermia para casi cualquier vivienda y situación. Si buscas confort continuo y máxima eficiencia, el binomio aire-agua + suelo radiante es difícil de batir. Si priorizas rapidez de instalación y flexibilidad por estancias, aire-aire (split) o fancoils responden de maravilla. Con una prescripción rigurosa, un control bien ajustado y emisores a baja temperatura, la aerotermia te permitirá calentar (y refrescar) tu casa con un consumo sorprendentemente bajo. Y, lo más importante, te dará ese confort de llegar, cerrar la puerta… y sentir que el hogar te abraza.

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