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¿Te gustaría calentar tu casa este invierno sin que tu factura de electricidad se dispare? Usar el aire acondicionado con bomba de calor puede ser una solución eficiente y económica. Te mostramos cómo configurarlo para obtener el máximo confort sin perder el control del consumo.

Familia disfrutando en el salón de la casa

Si tienes aire acondicionado en casa, es muy probable que cada invierno te hagas la misma pregunta: “¿Lo puedo usar para calentar sin que la factura de la luz se dispare?”. Y dudas entre encenderlo, abrigarte más o recurrir a otros sistemas de calefacción.

La realidad es que un aire acondicionado con bomba de calor puede ser un gran aliado en los meses fríos… siempre que sepas cómo utilizar el aire acondicionado en invierno, en qué modo ponerlo, qué temperatura es la ideal y qué hábitos te ayudan a gastar menos sin renunciar al confort. 

¿Se puede usar el aire acondicionado en invierno como sistema de calefacción?

Sí. Si tu equipo dispone de bomba de calor, puedes utilizar el aire acondicionado en invierno para calentar tu vivienda de forma eficiente. Sin embargo, es importante entender cómo funciona la aerotermia para poder sacarle el máximo partido.

¿Qué es la aerotermia?

La aerotermia es una tecnología que aprovecha el calor presente en el aire exterior, incluso en invierno, para calentar o enfriar el interior de la vivienda. Aunque suena similar a lo que hace un aire acondicionado, la aerotermia utiliza un sistema de bomba de calor que, al funcionar en modo calor, es capaz de extraer calor del aire exterior y transferirlo al interior de tu casa. Es un proceso basado en la transferencia de energía térmica, no en la generación de calor por combustión.

Cuando funciona en modo refrigeración, lo que hace es extraer el calor del interior de la vivienda y transferirlo al aire exterior, enfriando el ambiente. En este caso, la aerotermia funciona de manera inversa, utilizando el mismo principio de transferencia de calor, pero en dirección contraria. Esto permite un control eficiente de la temperatura durante todo el año, sin necesidad de cambiar el sistema de calefacción y refrigeración.

Pareja sentados en el comedor de su casa

Cómo utilizar el aire acondicionado en invierno: paso a paso desde el mando

Vamos con lo práctico. Estos son los pasos clave para configurar el equipo en modo calor y sacarle partido en los meses fríos.

1. Selecciona el modo calor

En el mando a distancia busca el botón de “Mode” o similar. Ve pulsando hasta que aparezca:

  • El icono de un sol ☀️ (modo calor), o

  • La palabra “Heat”.

Evita usar el modo “Auto” si quieres controlar bien el consumo: de este modo el equipo decide cuándo calentar y cuándo enfriar, y en invierno lo que te interesa es dejar claro que solo quieres calefacción.

2. Ajusta la temperatura ideal en invierno

Una de las grandes claves para aprender cómo utilizar el aire acondicionado en invierno sin que consuma de más es la temperatura de consigna.

Como referencia general:

  • En torno a 20–21 ºC para el día

  • 18–19 ºC para dormir

Son rangos que ofrecen confort a la mayoría de las personas con un consumo razonable (acompañando con ropa adecuada en casa).

Cada grado de más que pides al equipo puede suponer varios puntos de incremento en el consumo. Por eso, pasar de 21 ºC a 24 ºC no solo hace que tengas más calor, también puede hacer que lo notes en la factura.

En este artículo te lo explicamos en detalle. 

3. Regula la velocidad del ventilador

En el mando verás el botón de “Fan” o un icono de ventilador. Tienes varias velocidades:

  • Media/alta al inicio, para calentar más rápido la estancia.

  • Media/baja una vez alcanzada la temperatura deseada, para mantener el confort con menos ruido y consumo.

Evita tenerlo siempre al máximo a no ser que la estancia sea muy grande o haya corrientes de aire.

4. Coloca bien las lamas (rejillas de aire)

Las lámulas o lamas del split dirigen el aire. En modo calor, el aire sale caliente por la parte superior de la unidad y tiende a subir, así que te interesa:

  • Orientar las lamas ligeramente hacia abajo, para que el aire caliente no se quede pegado al techo.

  • Si tu mando permite oscilación vertical, actívala para repartir mejor el calor por la estancia.

Una buena orientación ayuda a que sientas confort antes, sin necesidad de subir tanto la temperatura.

5. Activa el modo ECO o ahorro de energía (si tu equipo lo tiene)

Muchos equipos modernos incluyen un modo ECO, Energy Saving o similar. Al activarlo:

  • El equipo ajusta la potencia y el compresor para reducir el consumo.

  • Mantiene la temperatura con menos picos de funcionamiento.

Es una buena opción cuando ya has logrado una temperatura agradable y quieres mantenerla durante varias horas con un consumo contenido.

6. Controla el clima desde tu móvil

Si sueles llegar a casa a la misma hora o quieres despertar con la estancia templada, la programación horaria desde una app en tu teléfono puede ser una opción muy cómoda:

  • Programa el encendido unos 20–30 minutos antes de la hora a la que sueles usar la estancia.

  • Evita encender y apagar de forma manual muchas veces al día (lo veremos en los errores habituales).

De este modo, el equipo trabaja de forma más estable y eficiente.

Mando para regular la temperatura

¿Cuándo ayuda a ahorrar electricidad frente a otros sistemas?

La aerotermia es una opción eficiente para calefacción y refrigeración, pero su rendimiento depende de varios factores.

  • Alta eficiencia: La aerotermia puede generar entre 3 y 4 kWh de energía térmica por cada kWh de electricidad consumido, lo que la hace más eficiente que radiadores eléctricos o estufas a gas.

  • Energía renovable: Aprovecha el calor del aire exterior, lo que reduce las emisiones de CO₂ y puede generar ahorros a largo plazo. Un ahorro que se multiplica que combinamos nuestro sistema de climatización con placas solares. 

  • Ideal para climas moderados: En zonas con inviernos suaves, la aerotermia es muy eficiente, ya que puede funcionar a temperaturas exteriores de hasta -5 ºC.

¿Cuándo no es tan eficiente?

  • En climas muy fríos: Si las temperaturas exteriores bajan de -10 ºC, la aerotermia pierde eficiencia y consume más electricidad, siendo menos eficiente que otros sistemas como las calderas de gas o geotérmicas.

  • Coste de instalación: La instalación inicial de aerotermia puede ser más cara, pero el retorno de la inversión llega en pocos años y a la larga es muy rentable. 

En general, la aerotermia es ideal para climas moderados, pero en zonas muy frías o si buscas una opción más económica de instalación, otros sistemas pueden ser más adecuados.

Errores habituales que hacen que el aire acondicionado en invierno consuma más

Tan importante como saber cómo utilizar el aire acondicionado en invierno es conocer qué hábitos disparan el consumo. Estos son los más frecuentes:

1. Altas temperaturas (24–26 ºC o más)

Subir mucho la temperatura de consigna no hará que la habitación se caliente antes: 
solo obligará al equipo a trabajar más tiempo y a mayor potencia.

Recomendación: mantén la temperatura en el rango de confort (20–21 ºC) y acompaña con ropa de abrigo y textiles de invierno (alfombras, mantas).

2. Encender y apagar continuamente

Apagar el equipo cada poco tiempo y volver a encenderlo cuando tienes frío provoca:

  • Más picos de consumo.

  • Sensación de “diente de sierra” (pasas de frío a calor y viceversa).

Recomendación: en periodos de uso prolongado (por ejemplo, toda la tarde en casa), es más eficiente mantener una temperatura estable y moderada con el termostato, en lugar de apagados y encendidos continuos.

3. Mal aislamiento: puertas y ventanas siempre abiertas

Si el calor se escapa, el equipo tendrá que trabajar más tiempo para mantener la temperatura.

Recomendación:

  • Cierra puertas de habitaciones que no uses.

  • Revisa ventanas y balcones para evitar filtraciones de aire frío.

  • Utiliza burletes o sistemas sencillos de sellado si notas corrientes.

4. Falta de mantenimiento y filtros sucios

Los filtros sucios reducen el flujo de aire, hacen que la máquina se esfuerce más y, por tanto, consumen más.

Recomendación: limpia los filtros con la frecuencia que indique el fabricante (en muchos casos, cada pocas semanas en temporada de uso intenso).

Usar el aire acondicionado en invierno es una forma eficiente de calentar tu hogar sin aumentar el consumo energético. Ajustando correctamente la temperatura, el modo y evitando errores comunes, puedes disfrutar de un ambiente confortable y ahorrar electricidad. Con la aerotermia, aprovechas el calor del aire exterior, haciendo tu calefacción más sostenible y económica.

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